Agustín Cáffaro pasó por CABB Radio y analizó los factores de su gran temporada. Próximos desafíos, la Selección y mucho más.

Después de concretar su mejor temporada en la Liga Nacional, Agustín Cáffaro se tomó una semana de descanso y ya nuevamente se puso a trabajar pensando en próximos desafíos. Tal vez allí radique el argumento central de su despegue y consolidación. El santafesino pasó por CABB Radio y dejó muy interesantes frases sobre la importancia del trabajo para el crecimiento. Además recordó su paso por la Selección, sus inicios, sus espejos en la posición y el sueño de compartir cancha con sus hermanos.

"Cuando termina la Liga, uno se toma unos días. Justo dio la casualidad que Francisco, mi hermano, estaba en casa y aproveché para estar una semana en familia. Después seguí practicando porque que no se puede regalar nada, sobre todo por si llega a estar la posibilidad de meterme en un lista previa. Quiero estar al 100%. Y lógicamente llegar bien a la Liga que viene".

"Pasé por algún bajón porque uno entrenaba mucho tiempo y quizás no le tocaba jugar mucho, y eso te hace pensar si estás haciendo las cosas bien, si falta algo, pero las ganas de estar constantemente bien te empujan a seguir adelante".

"En Libertad encontré esa búsqueda que no venía hallando, que sí había vivido en Sportsmen y en Huracán de Trelew. Haber conseguido un buen nivel en la Liga Nacional tuvo que ver, creo yo, con que decidí salir de un lugar en que estaba cómodo. Obviamente que también influyeron la institución, el cuerpo técnico y el grupo, porque todos ellos confiaron en mí. Me ayudó a encontrar lo que venia buscando: una estabilidad en una gran Liga para después seguir escalando hasta donde se pueda".

"Tanto la familia de mi mamá como la de mi papá son bastante altos, del lado materno mi abuelo mide 2 metros y mi vieja cerca de 1.85. Esos genes maternos y el acompañamiento del lado de mi padre ayudó. La talla es algo muy bueno para el deporte que estamos practicando".

"Después de esos partidos en las ventanas me han felicitado bastante, pero los que mas me conocen y más me quieren (mi familia, mi novia, mis amigos) me dijeron que tengo que seguir trabajando, que es un lugar para privilegiados, haber estado no significa nada. Mi entrenador en Libertad, Saborido, me comunicó lo mismo, que es un gran progreso pero hay que continuar trabajando. Los buenos consejos están siempre cuando uno está rodeado de gente que quiere".

"En Piamonte no hay ni cancha, ni pelota de básquet, así que arranqué a jugar a los 12 años cuando me fui a San Jorge, a hacer la secundaria. En la niñez, como en todo pueblo, se patea la pelota, yo era un poco malo, pero me gustaban siempre los deportes. En San Jorge inicié la práctica de básquet por mi altura y el gusto por los deportes. Ahí me fui enamorando e interiorizándome más, obvio que sabía de la gesta del oro en Atenas, pero conocía poco del ambiente. Con el correr de los años fui sabiendo más y dándome cuenta del valor de la Selección Argentina y de muchas historias del básquet argentino que son muy grandes".

"En las ventanas intenté estar suelto, no presionarme, no pensar tanto que estaba con la camiseta que uno soñó siempre con defender, porque sabía que de esa manera por ahí podía ser complicado rendir, y quise hacer lo que venía realizando con Libertad. Uno siempre tiene en la cabeza vestirse con los colores argentinos. Siempre quise seguir trabajando porque sabía que era la única manera de tener una chance, pero sin ilusionarme ni encasillarme en eso, porque de esa forma es más complicado".

"Un poco por mi forma de jugar, correr y saltar lo siento de esa manera terminar en volcadas. Teniendo la posibilidad queda más lindo y le levanta más el ánimo a uno y al equipo esa situación. Sino se puede y, hay que definir de otra manera, lo hago".

"Siempre miro a los pivotes, por una cuestión posicional. Siempre seguí -por posición y por cómo entrena- la manera en que trabaja y que se mueve Luis Scola. En las finales de NBA por ejemplo, ahora me gusta mucho Pascal Siakam, pero siempre miro lo que puedo llegar a tomar de cada uno, y después entrenarlo. Lo que me gustaría seguir trabajando es el tiro de tres puntos, esta temporada lo pude utilizar un poco mas. Creo que lo que más tengo que trabajar es el poste bajo, pero por mi peso y mi forma de jugar es un poco mas difícil".

"Compartir con mis hermanos Francisco y Esteban sería un lindo un equipo de 3x3, se nos complicó siempre entrenar juntos, porque mis primeros años estuve en San Jorge y ellos arrancaron en Trebolense y ya no estaba. Pero con ese equipo me enfrentaría a cualquiera jaja".