El Rojinegro tuvo que esforzarse al máximo para imponerse ante un durísimo rival, que fue de menor a mayor, por 86-75 y sellar la clasificación a las semifinales de los playoffs interconferencias.

Bajo un marco repleto y un ambiente estruendoso, el equipo de Mariano Panizza sigue alimentando su sueño de conseguir el ascenso a la Liga Argentina y anoche dio un gran paso rumbo a ese objetivo, tras vencer nuevamente, esta vez de local, a Estudiantes de Formosa y barrer la serie 2-0.

Central Entrerriano mostró dos caras en el primer tiempo. Jugó un estupendo cuarto inicial y bajó el nivel en el segundo. El Rojinegro tuvo un inicio a toda orquesta, con un parcial inicial de 8-0 y sacando ventaja de dos dígitos en los primeros diez minutos.

La habitual intensidad y eficacia en defensa, le abrió los caminos para llegar al gol con ataques rápidos, posesiones largas y mejores porcentajes que su rival en los tiros externos (3-10 contra 0-6).

La conexión entre Alejandro Madera y Martín Gandoy y los rompimientos al canasto, más el tiro a distancia, de Martiano Dato fueron los principales argumentos ofensivos de los de calle España en el arranque de juego.

En el segundo cuarto, la visita se recuperó de la paliza basquetbolística de Central en el amanecer del juego y respondió con un parcial de 14-0 para ponerse en partido, gracias al aporte de sus internos Marcos González y Javier Cáceres, aunque éste último convirtiendo con tiros de frente al canasto.

Pero Central salió a tiempo del asedio con una acción de dos y uno de Dato y un triple de Ravina, aunque la visita lo cerró mejor y se fue con mejores sensaciones al entretiempo, al acortar la diferencia en el marcador de 17 a cuatro puntos.

El tercer cuarto fue el más parejo de todos, porque la visita, a partir de un inspirado Agustín Sigel con los rompimientos al canasto, emparejó el marcador y logró pasar al frente por primera vez en el juego (43-46). Los minutos finales de ese período fueron palo a palo, cambiándose ambas escuadras el mando del marcador, sin embargo, el conjunto rojinegro volvió a tomar aire en el final, empujado por aliento incesante de su gente, con un triple de Ravina y un doble de Di Meo, para llegar en ganancia al último cuarto.

En el capítulo final, Central pudo destrabar el partido desde la experiencia de sus individualidades y, sobre todo desde la defensa, con un parcial de 8-0 (68-60), encaminó una victoria trabajosa, con un buen funcionamiento colectivo y con jugadores en gran nivel, hechos para la medida de estos playoffs, como el cordobés Alejandro Madera, el pergaminense Martín Gandoy, el villaguayense Sergio Ravina y los primos paranaenses Martiniano Dato y Lautaro Pividori, quienes nuevamente pasaron la barrera de los doble dígitos.

El próximo rival del Rojinegro en las semifinales de los playoffs entre conferencias será Provincial de Rosario, que también barrió su serie ante San Martín de Curuzú Cuatiá.

La serie, con días y horarios a confirmar, comenzará en Gualeguaychú con el primer juego y se trasladará a Rosario para un segundo e hipotético tercer punto.
Por otra parte, Tokio de Posadas eliminó a Centro Bancario de Gualeguay por 2-0 y enfrentará a Santa Paula de Gálvez, que también pasó la escoba a Cultural de Santa Sylvina Chaco, en la otra semifinales entre los equipos de la Región Litoral y la División NEA.

Síntesis:

Central Entrerriano (86): Lautaro Pividori 10, Martiniano Dato 18, Martín Gandoy 16, Alejandro Madera 15, Sebastián Benasconi 6 (fi) Francisco Di Meo 6, Sergio Ravina 12, Jeremías Dreiling 3 y Martín Fagalde 0. Ent: Mariano Panizza.

Estudiantes (75): Agustín Sigel 24, Leo Solís 4, Sergio Mora 5, Leonel Rodríguez Ceu 9, Javier Cáceres 13 (fi), Franco Giménez 7, Marcos González 8, Matías Pikaluk 5y Franco Chir 0. Ent: Félix Medina.

Parciales: 23-11, 40-36 y 68-58.

Árbitros: M. Robles – L. Moreno.

Estadio: J. M. Bértora.

Fuente: Prensa Central Entrerriano.