El base de la Selección Mayor masculina analizó la victoria del equipo frente a Chile por la ventana clasificatoria para la AmeriCup 2025. Reflexiones del triunfo, la renovación del plantel y su rol de líder.

Argentina empezó con buen pie su camino hacia la AmeriCup 2025. El pasado jueves, lo dirigidos por Herman Mandole derrotaron a Chile por 90-78 en Mar del Plata en su primer compromiso por la Ventana Clasificatoria para el certamen continental del año que viene.

“Fue un partido que sabíamos que iba a ser difícil, que Chile nos iba a poner incómodos en todo momento, que nos iba a jugar duro, físico e intenso. Creo que nosotros dentro de esa incomodidad intentamos encontrar buenas sensaciones”, explicó Facundo Campazzo, que finalizó con 15 puntos y 8 asistencias para 19 de valoración, el número más alto del equipo junto a Gabriel Deck.

En la misma línea agregó: “Por momentos lo hicimos muy bien, pero cuando empezamos a gastar energía en cosas externas, ahí nos empezaron a castigar de tres puntos, a dejar de defender y a tener mala selección de tiro. En líneas generales estoy contento porque jugamos un partido que dominamos, salvo en el segundo cuarto, nos pasamos bien la pelota, defendimos por momentos muy bien y tenemos margen de mejora. Eso es lo más importante, tenemos que poner nuestra energía ahí. A seguir trabajando y a esperar un juego en Chile súper difícil”.

El duelo del jueves marcó el debut de dos jóvenes que están haciendo sus primeros pasos en la Selección: Gonzalo Corbalán y Juan Ignacio Marcos. Además vieron acción los U19 Lucas Giovannetti y Juan Bocca, que jugaron su primer partido por la Ventana Clasificatoria: “A los más chicos los vi bien. Obviamente ansiosos como estábamos todos pero normal en ellos, por ser una de las primeras veces que están con la Selección. Intentamos ayudarlos a que estén tranquilos. Tomamos la responsabilidad nosotros para que ellos jueguen libres, con tranquilidad, como lo hacen en sus clubes”.

En ese sentido, el referente del seleccionado agregó: “Ellos nos dan esa dosis de energía, ese plus que necesitamos de juventud y agresividad. Si logramos combinar la experiencia que tenemos con los jóvenes que están apareciendo, cosas buenas van a pasar. Estamos muy contentos con lo que estamos viviendo con los más chicos. Hay todavía más jóvenes que no están. Y se los ve con ganas, eso es lo más importante”.

En cuanto específicamente al debut de Juani Marcos, que finalmente pudo vestir la camisea de la Selección de manera oficial, Campazzo explicó: “A Juani Marcos lo vi bien, suelto y tomando buenas decisiones, marcando las jugadas correctas. Chile es un rival difícil y te hace jugar un poco incómodo, así y todo tuvo buenos pasajes defensivos y ofensivos. El equipo no bajó cuando él estaba en cancha. Intentó involucrar a sus compañeros, intentó ser agresivo. Jugó como es él y es lo que a nosotros nos ayuda para ganar los partidos. Va a seguir mejorando y a nosotros nos da mucho cuando se divierte y la pasa bien adentro de la cancha”.

El recambio generacional implica también otro rol para Facu. El base es el referente con la misión de acompañar el crecimiento de la nueva generación: “Intento poner mi energía en trabajar y en mostrar lo que a mí me sirvió y lo que vi de generaciones anteriores para seguir haciéndolo, sobre todo afuera de la cancha que es mucho más importante que lo que pasa adentro. Lo bueno de los jóvenes es que son muy receptivos, muy curiosos y tienen ganas de aprender. Nosotros estamos abiertos a mostrarles cómo se trabaja en la Selección”.