Al cumplir los 18, Rausch dejó la casa familiar en Santa Elena y su club Progreso, para venirse a Concepción del Uruguay a estudiar y jugar en Regatas Uruguay.
A través de whatsapp programamos la entrevista al otro día para las 6 y media de la tarde. A las 18.30 Nicolás Rausch cruzó la puerta de la oficina de prensa dispuesto para la charla. La puntualidad denota una de las características que más han ponderado sus compañeros y entrenadores, la madurez.
"Al principio fue difícil, la competencia (haciendo alusión al TFB) es muy diferente, incluso la manera de entrenar. Allá a veces hacíamos `picones´ solamente y acá se trabajan los fundamentos, la técnica, es otra realidad."
Recién llegado al plantel dirigido por Rimoldi, Nico Rausch empezó a sumar minutos alternando la conducción del equipo con Nicolás Correnti primero y Joaquín Baeza después.
"La adaptación fue difícil. Yo vine a Concepción a estudiar y con los horarios no me sabía organizar. Terminaba muy cansado, me frustraba y no rendía ni en la facultad ni en el club".
Como cualquier chico que deja su casa para irse a estudiar y vivir solo, el base celeste atravesó con pesadumbre el camino de la independencia. "Creo que esa etapa me ayudó bastante porque sino el salto de calidad no lo pudiera haber hecho o me hubiera rendido en las primeras prácticas".
Con el paso del tiempo Rausch empezó a jugar cada vez más minutos en el equipo del TFB, incrementando su confianza y posicionándose como una alternativa de calidad.
"El rodaje que te da el Torneo Federal es importantísimo y también los entrenamientos. `Tato´ (Santiago Rimoldi) tiene una manera de plantear las prácticas en las que siempre aprendes algo nuevo. A veces es complicado sacarse el chip de hacer las cosas de una manera que la venimos haciendo desde chicos, para cambiar por lo que el entrenador te pide que es realmente como se debe hacer, pero lo bueno es que es un aprendizaje".
Regatas Uruguay en este tiempo de receso, sigue compitiendo en la liga local con algunos jugadores del plantel mayor. Facundo Mendoza, Agustín Aguirre, "Juanfri" Boffeli y Nicolás Rausch, entre otros, utilizaron esta competencia para mantenerse en actividad hasta el próximo 02 de septiembre momento en el que comience la pretemporada.
En cuanto a las proyecciones para lo que viene, Raush considera que debe mejorar en su confianza, "ser quien pida la pelota y tener la capacidad de resolver, hacer más puntos, mejorar el tiro desde afuera y hacer jugar más al equipo" expresó el joven.
Con 19 años trata de mantener la vida académica y el deporte. Confiesa que no tiene mucha vida social, aunque advierte que desde la Facultad y el club le brindan la contención necesaria para desarrollar ambas actividades.