Central recuperó la memoria en su estadio: ganó la batalla en los tableros, impuso su alto ritmo de juego y estuvo acertado especialmente desde el doble. Quarroz fue el goleador y Panozzo el player más valioso.
Central Entrerriano necesitaba una reacción, y la encontró con números contundentes. En el segundo punto de las Finales, el Rojinegro se impuso por 88-68 a Santa Paula y forzó el tercer y último partido de La Liga Federal 2025. El equipo de Martín Pascal dominó los tableros, fue más preciso en el tiro de dos y corrigió aspectos claves del primer encuentro.
Uno de los aspectos fundamentales fue el dominio en la lucha rebotera: Central se impuso 40 a 31, incluyendo 12 rebotes ofensivos. La presencia de Panozzo en la pintura fue determinante. En cuanto a la efectividad, el Rojinegro no brilló desde el triple (6/21, 28 %), pero marcó la diferencia en el tiro de dos puntos -no solo por puntería sino también por cantidad-: 52 % de acierto (22/42) frente al 37 % de Santa Paula (9/24). Desde el libre, Central fue muchas más veces a la linea, y firmó un 76 % (26/34) contra una visita de 77 % (14/18).
En el número de asistencias hubo paridad (11 a 10 para Santa Paula), pero las pérdidas fueron decisivas: Santa Paula perdió 18 pelotas y robó solo 7, mientras que Central solo perdió 10 y recuperó 14. Una ventaja neta de +11 en posesiones, clave en este tipo de partidos.
En lo individual, Leandro Quarroz fue el goleador con 19 puntos (7/8 en dobles), pero el jugador más valorado fue Marcos Panozzo, quien firmó una planilla de 17 puntos y 14 rebotes, con 31 de valoración. También sumaron en la ofensiva Cristian Pérez (13 puntos y 3 triples) y Manuel Lado, que aportó su experiencia con 12 unidades y buenos pasajes defensivos. Aquiles Montani, otra clave local con 14 tantos.
Por el lado del Azul, los más destacados fueron Jerónimo Díaz Muller (15 puntos), Augusto Barbieri (13 con 3/5 en triples), Sebastián Puebla (12, con 2/6 en triples) y Gino Balbo (11, con 3/9 en triples). Nicolás Solari, figura en el Juego 1, no repitió su actuación estelar, pero aportó 8 unidades (2/4 en triples). Los de Gálvez deberán levantar su eficiencia y sobre todo disminuir la cantidad de posesiones del local si quiere festejar en Entre Ríos.
Central supo en el Juego 2 imponer el ritmo que lo llevó hasta esta instancia: más vertical, más físico, más intenso. Y lo hizo valer en su casa, sin el peso del viaje y con el aliento de su gente. Ahora, la serie está 1-1 y se define todo este jueves, desde las 21.00, otra vez en el José María Bértora. Solo una noche, solo un partido, solo un campeón.