Con dos mundiales en su haber, la jugadora de Vélez Sársfield es una de las más experimentadas de la Selección femenina. Sin embargo, Paula Gatti va por más y ya piensa en República Checa 2010: “Yo siempre quiero estar y haré mi mayor esfuerzo para lograrlo”.
Paula Gatti jugó dos mundiales en la categoría mayores. Participó del 14° puesto obtenido en Alemania 1998 y fue una de las piezas claves para lograr aquel histórico noveno puesto conseguido en el Mundial de Brasil en el 2006.

En charla con CABB.com.ar, la actual jugadora velezana cuenta el deseo, tanto de ella como de sus compañeras, de estar en la cita mundialista. “Estamos todas muy motivadas, un mundial es increíble, es una experiencia única y todas, las más grandes y las más chicas tenemos muchas ganas de trabajar para llegar a septiembre en el mejor nivel para afrontar este importantísimo Torneo”, contó.

-¿Cómo te sentiste en esta primera etapa de trabajo del año?
-La verdad, estoy volviendo de una ruptura parcial de ligamento interno, que me dejo afuera de las finales del Torneo Metropolitano (Clausura) y la LNB 2009. Por lo que después de varios meses parada, se hace cuesta arriba, estoy muy fuera de ritmo, pero por suerte los médicos dicen que falta mucho para septiembre, y que, como en el verano hice la respectiva rehabilitación, de a poco me voy a sentir mejor.

-¿Cómo ves tus posibilidades de estar entre las doce para este certamen?
-Siempre supe que para estar, y aportar al equipo lo mucho o poco que pueda dar, tengo que estar en un buen nivel. Me ha tocado viajar o no, jugar o no pero siempre supe entender las reglas del juego. Desde luego yo siempre quiero estar y haré mi mayor esfuerzo para lograrlo.

-¿Qué significaría jugar un tercer mundial de mayores?
-Significa primero que nada, que sin dudas es el último Mundial. Afrontar cualquier desafío con la camiseta de la Selección significó y significa mucho para mí. No por nada uno hace malabares para poder hacer todo. Trabajando antes y después en exceso para no tener problemas en el ámbito laboral, llevando trabajo a los viajes, o dilatada en su momento la carrera. Creo que este Mundial puntualmente, tiene un sabor especial, porque se logró acceder con todas jugadoras locales menos una, Carolina Sánchez, jugadoras que no se dedican 100% a esto, que trabajan y/o estudian, lo que demuestra que el nivel en Argentina ha mejorado.

-¿Para qué estará Argentina en el Mundial?
-El planteo será siempre el mismo: mejorar o al menos igualar la performance anterior. La zona no es fácil, habrá que ver cómo llegamos todas a ese momento, si logramos esa hermosa mística que tuvimos para el Premundial, mezcla de garra, entrega y búsqueda de un único objetivo por parte de las jugadoras y el cuerpo técnico. Luego nos quedará ver si podemos trasladar a la cancha todo lo que entrenamos y estamos convencidas que es lo mejor. Creo que la mayor diferencia entre dedicarse al básquet y no, es que cuando uno se dedica al deporte en forma profesional, reduce la probabilidad de que las cosas no salgan como uno pretende, como uno trabajó durante el año. Esperemos que salga.

-¿Qué debe hacerse en este 2010 para realizar un año tan bueno como el que pasó?
-Lo importante es que tengamos todos en claro que hay que buscar avanzar, mejorar. Muchas veces, y desde luego espero que no sea este año, nos ha tocado retroceder para luego seguir avanzando con mayor envión. El tema está en reconocer que éste es el camino: el del trabajo duro, la dedicación, el compromiso, y la búsqueda de aquellas piezas que hagan que el motor funcione de la mejor manera posible y no las mejores individualidades, que no necesariamente hacen al mejor equipo.

Patricio Gioia
Prensa CABB