El argentino de 19 años y 2,03m, que acaba de sumarse a la delegación argentina en España, la rompió en su debut para la Academia CBA que conduce Juan Gatti. Presente, expectativas y su horizonte en Europa.

Alejo Maggi es la más reciente incorporación a la larga lista de jóvenes embajadores argentinos en Europa. Luego de su extenso paso por Ferro Carril Oeste, se sumó a la CBA, la Academia de la ciudad de Badajoz, que conduce otro argentino, el ex asistente de la Selección Mayor, Juan Gatti. El interno de 2,03m nacido en el año 2002 la rompió en su debut el pasado fin de semana en la Liga EBA, la cuarta división del básquet español. Su equipo cayó ante el Bodegón Andalucía CB Cimbis en tiempo suplementario, pero Maggi se despachó con 28 puntos y 8 rebotes en 40 minutos.

A principio de este año tuvo la posibilidad de ser parte de todas las concentraciones de la Selección Nacional U19, aunque no pudo quedar en el equipo definitivo que disputó el Mundial de Letonia. Si bien Alejo tiene un apellido ilustre para nuestra Liga Nacional, no tiene parentesco con Diego, el histórico interno que también vistió la camiseta de Ferro. Sin embargo, el vínculo familiar con el básquetbol es fuerte. Su padre también jugó en Ferro y tiene dos hermanas en proceso de Selecciones Nacionales Formativas.

¿Cómo te definirías como jugador? ¿Qué metas te ponés para tu carrera? ¿Qué pasos te gustaría dar?
- Me definiría como un jugador multifuncional. Puedo jugar de frente, de espalda, defender jugadores más bajos, más altos, y creo que eso aporta a cualquier equipo en el que esté. Como fortaleza diría que estoy siempre dispuesto a entrenar y aprender cosas nuevas. No me pongo metas específicas, pero quiero llegar a ser la mejor versión posible de mí para poder vivir de esto. Si mi máximo potencial llega hasta donde estoy ahora, que así sea, y si mi futuro me depara algo más alto, mejor.

¿Qué lugar ocupa el básquet en tu familia? ¿Cómo es convivir con dos hermanas en proceso de selección nacional?
- El básquet en mi familia ocupa un lugar muy grande ya que es como un idioma que todos entendemos en mi casa. Saber que podemos contar unos con otros para consejos, entrenamientos o lo que fuera, la verdad que te da un plus emocional. Que mis hermanas estén en procesos de selección me pone muy contento y orgulloso. Ellas entrenan duro para estar ahí y que las convoquen es un premio a ese sacrificio que hacen. Todos tenemos el deseo de representar a la selección y que cada uno pueda hacerlo en su categoría es un lujo.

¿Qué representa Ferro en tu vida? ¿Cómo fue jugar el Federal la temporada pasada, qué te dejó?
- Ferro es un club más de mi carrera deportiva. Me dio el pie para jugar mi primera Liga de Desarrollo y mi primer argentino de clubes, y siempre voy a recordar eso con cariño. No tuve oportunidad de terminar de jugar el Federal del año pasado por motivos personales, pero fue un proceso cargado de aprendizaje ya que éramos un equipo muy joven jugando en una liga de equipos con jugadores muy experimentados. Eso nos sacó de nuestros rivales normales, que siempre fueron equipos de Liga de Desarrollo o equipos U19, y nos obligó a mejorar nuestro juego para plantarles cara.

¿Cómo viviste el proceso de Selección con la U19?
- Lo viví de una gran manera, siempre dando el 100%, esforzándome en todos los entrenamientos y aprendiendo lo más posible. Se había creado un clima de competición muy bueno, en el que todos jugábamos muy duro, pero siempre sabiendo que lo que pasaba adentro de la cancha quedaba ahí. Mis expectativas personales eran mejores de lo que al final pasó. Me vi bien entrenando y creí que podía ser parte del equipo pero la decisión final no fue esa. Eso me dio un empujón extra para seguir entrenando y poder demostrar lo que fue para mí, una decisión equivocada.

¿Cómo se dio la llegada a España? ¿Qué fuiste a buscar dando el salto a Europa?
- Lo de España llegó buscando nuevos desafíos. Habiendo terminado mi contrato con Ferro quería ver sí podía surgir algo internacionalmente, y así lo hable con mi representante, Gustavo Monella. Él fue quién hizo el trabajo de conexión con el equipo que finalmente terminé aceptando. Quiero medirme a ver si soy capaz de jugar internacionalmente, que entrenadores me vean para empezar a estar en el radar internacional y ver que tan lejos puedo llegar en mi carrera deportiva.

Llegaste hace muy poco ¿Cuáles son tus primeras impresiones de la forma de trabajar?
- La forma de trabajar y organización de CBA Academy son excelentes, el entrenamiento es muy bueno y muy cansador, que es justo lo que estaba buscando. Tengo la suerte de conocer al entrenador Juan Gatti y el preparador físico Matias Suhurt, lo que también me da una confianza y una ayuda extra a la hora de entrenar. El hecho de tener entrenamientos con jugadores de distintos países que persiguen el mismo objetivo que el tuyo, te motiva y te alienta a dar siempre un poquito más de los que podés dar. Aún no pude disputar tantos partidos como para opinar de la competencia, pero el primer partido que tuve fue muy peleado y competitivo.

¿Qué te pasó en el debut, cómo te sentiste antes y después del partido?
- Antes de jugar estaba tranquilo, sé las armas que tengo y lo que puedo hacer así que salí a jugar pensando simplemente en dar lo mejor de mí. Tenía cierta incertidumbre ya que fue mi primer partido afuera de mi país, pero se disiparon rápidamente. Después del partido tuve sensaciones cruzadas, ya que a pesar de tener un buen juego personal, perdimos el partido que podríamos haber ganado tranquilamente. Las sensaciones fueron tristes por el resultado final, pero relajado de que mostré una buena versión de mí.